martes, noviembre 29, 2005

Un toque de canela

Estábamos este fin de semana cenando con una amiga cuando nos dijo "¿Vemos una película? Que nos regalan los de Imagenio cuatro" Cáspita, pensé yo, conociendo los gustos cinematográficos de mi anfitriona, más cercanos a "El hombre que susurraba a los caballos" que a "Rambo 7". Total, que buscando, buscando por los menús, nada más y nada menos que nos encontramos con esta de gastronómico nombre.

La película trata de una familia de griegos de Estambul (que está en Turquía) que por conflictos de los años 60 entre ambos paises, son expulsados y vuelven a Grecia. Estos tienen un hijo que le gusta más la cocina que cualquier otra cosa y un abuelo que regenta un establecimiento de ultrmarinos con especial interés por las especias. Para él, casi todo se puede explicar mediente las especias y el olfato. Con la separación, también se separan el niño y el abuelo y el niño y una niña que le hacía tilín.

Con esta trama, ¿que se puede esperar? Pues una película de sofá y frio en la calle. Los escenarios de Estambul hacen que sientas ganas de coger la maleta e irte. Las escenas de comidas familiares dan un poquito de hambre, y muchas ganas de cocinar. Y el uso de las especias me ha entusiasmado, dado que soy super fan de las mismas. Luego lo que es la película es una de esas que cuentan una historia con mucho simbolismo, por lo que si no estás al loro, sólo ves una película de amor y ternura, pero seguro que hay algo más.

Resumiendo, para esos días que estas tontorrón o en los que te sientes feliz por ser mujer. No me disgustó, pero se aleja mucho de los peliculones que suelo paladear.

Besitos.

P.D: No sabemos nada de nada sobre la historia reciente de Europa.
P.D.2: Yo quiero que pongan una tienda como la del abuelo en mi barrio.
P.D.3: Salen tetillas!!!! que se me olvidaba ;-)

3 comentarios:

Anónimo dijo...

Vaya, sí que me ha sorprendido que vieras esta peli...

A mí me gustó, aunque hay que reconocer que la historia es bastante simplona. Visualmente había momentos que me recordaba a Amelie y el tema culinario un poco a Chocolat

Me hace gracia que haya salido ahora porque el protagonista es un astrónomo griego, y el viernes en la reunión de Atenas estuvo hablando con uno (astrónomo griego)... ¡qué cosas!

Además, me encanta la cocina griega.

Pero sí, peli no apta para aficionados a Torrente 3 :)
(yo diría que sólo si os gustó Chocolat os puede gustar esta)

Raúl

Anónimo dijo...

Pufff, salvado por la campana (PD3). Si salen tetillas igual tiene un pase, aunque sospecho por las referencias del Sr Don Raul que estamos ante un bodrio de extraordinarias dimensiones (para los amantes del buen cine como Terminator 6, Vivancos 3 y otras.. ;) jeje).

Bueno, realmente entré ante el anzuelo de una inminente crítica al fenómeno cinematográfico del momento: Harry Potter. Confio en que a no mucho tardar pueda disfrutar de un completo análisis de esta, nuevamente, gran entrega de la saga. (Ahi estaba Fran el viernes pasado, solo falto de gafas y bufanda de Griffindor, para no perderse el estreno).

Aguardaré, no obstante, a que su crítica majestad la vea para comentarla, por no revelar ningun dato trascendental, como por ejemplo que Ron sufre poluciones nocturnas o que Hermione tiene relaciones vacias basadas únicamente en el físico :P (tal vez sean datos poco fiables, pero también hay que aportar imaginación a la película para terminar de redondearla, no?)

Sin más se despide un servidor, aguardando impaciente la heroica ingesta alcohólica que espera el Jueves.

Tito Chinchan dijo...

Buenas,

ya me parecía a mí que dos comentarios cinematográficos sobre la canela eran muchos.

La historia es simplona, pero oculta una realidad muy triste, bueno dos. Por un lado, el horror de tener que abandonar un país simplemente por pertenecer a otro, aunque pertenezcas a aquella cultura más que a la propia. Por otro lado, la mierda de las religiones que no hacen más que separar a las personas.

Mañana tendremos la crítica del Harrys Potter, no se apure señor Fran.

Besitos.